La forma en la que traza sus objetivos Paula Pareto puede llegar a ser cuestionable. Eso de viajar horas y horas semanales para entrenarse, mientras estudia en otro lugar distante de su hogar, puede ser presentado como algo heroico, pero no es lo ideal para un deportista de alta competencia.
Lo que jamás va a quedar en duda es la pasión y la efectividad de la Peque. La medallista olímpica en Pekín 2008 cumplió luego una buena actuación también en Londres, aunque no alcanzó el podio (quedó quinta). Los finales de esos procesos pueden ser muy desgastantes para un competidor de elite, suelen descargar toda la energía allí. Paula descansó para recuperarse, pero enseguida visualizó y recalculó sus metas. Un 2013 más tranquilo desde lo deportivo y enfocada exclusivamente en completar su carrera. Se recibió de doctora en la UBA hace poco más de un mes.
Y cerrada una etapa, abrió la otra casi de manera inmediata. Porque una trayectoria con dos ciclos olímpicos completos (8 temporadas) pueden parecer demasiado. Pero Pareto tiene apenas 28 años. Tras recibir su título preparó la gira por Europa, para probarse otra vez en torneos importantes. «La idea es sumar puntos para el ranking, que es lo que te da la clasificación olímpica y prepararme de la mejor manera para los Juegos Odesur».
La semana pasada, la argentina logró una medalla de bronce en el torneo Abierto de Francia, un Grand Slam, el más alto en el que se puede participar en el circuito, por fuera de las competencias puntuales como Master, Mundial o Juego Olímpico.
Ahora se trasladó a Italia y se consagró campeona del Abierto Europeo con un recorrido arrollador. En la categoría mínima (hasta 48 kilos), entró directo a la segunda rueda por su ranking (7»), donde venció a Ewa Konieczny (Polonia). Luego, en cuartos de final dejó atrás a Miri Toda (Japón) y en las semifinales a Gabriela Chibana (Brasil). En el duelo decisivo, superó por ippon a Taciana Lima (Guinea Bissau, N° 13 del mundo).
«Hola fiebre, ¿y si te vas por un día que mañana tengo que luchar?», escribió anteayer Pareto en su cuenta de Twitter (@paulipareto). El momentáneo malestar no fue suficiente para detenerla. Ayer amaneció mejor y entró en el tatami como si nada hubiera pasado.
Después de escuchar el Himno en el podio, volvió a comunicarse por las redes sociales: «Gracias a todos por el aguante, estoy muy feliz por esta nueva medalla!»
A la gira por Europa le falta, todavía, la tercera y última escala. Pasado mañana, Pareto tiene programa de entrenamiento en Alemania, para competir desde el viernes próximo en el Grand Prix de Düsseldorf. Después sí podrá volver a la Argentina para reencontrarse con los afectos y definir la preparación final rumbo a los Juegos Odesur, que se efectuarán en Santiago, Chile, entre el 7 y el 18 de marzo. Viniendo de ella no se puede esperar otra cosa que allí tenga el comienzo de otro ciclo olímpico llenó de ilusión.
Las otras tres argentinas que integraron la delegación argentina no tuvieron buena fortuna en el Abierto de Roma de mujeres. Todas quedaron eliminadas en la rueda preliminar. En la categoría de hasta 52 kilos, Oritia González cayó ante Lien Pei-Ju (China Taipei); en 57 kilos, Melissa Rodríguez perdió con Ana Jorge (Portugal), y en 63 kilos, Gimena Laffeuillade no pudo con Rotem Shor (Israel).