Daiana Ocampo se consagró como campeona de la Maratón a Pampa Traviesa

Daiana Alejandra Ocampo, de Pilar, y Miguel Angel Barzola, de Bragado, se consagraron como los nuevos campeones argentinos de maratón al obtener la 36a. edición del tradicional Maratón a Pampa Traviesa, realizado en las calles de Santa Rosa.

Además de las dificultades propias de los tiempos de pandemia, el clima no acompañó la realización de esta prueba (que tuvo una participación restringida debido a las normas sanitarias). Un temporal sobre la capital pampeana, desde las primeras horas del domingo 18 de abril, perjudicó a los atletas, y fue especialmente duro tanto en los tramos iniciales como en los finales de esta especialidad, ya de por sí tan exigente. Y, además, tuvieron que atravesar varias zonas anegadas.

En esas condiciones, la marca lograda por Daiana Ocampo se puede considerar una verdadera hazaña. Quedó a sólo 8 segundos de su registro personal. La valiente atleta argentina -campeona sudamericana de medio maratón y maratón en 2019- ha tenido una sucesión de mala fortuna en su búsqueda de su sueño olímpico. A finales de la temporada pasada tuvo que atravesar una verdadera odisea hasta poder competir en el maratón de Viena bajo un intenso frío (la semana anterior, le cancelaron a todos los extranjeros su participación en el Nacional de Polonia, donde ella ya se había encontrado, pasando además las normas sanitarias y el aislamiento). Fue allí, finalmente, donde consiguió su mejor marca -y tercera del historial argentino permanente- con 2h 31m 33s, que ahora buscaba mejorar.

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Prácticamente desde entonces no hubo competencias internacionales y Santa Rosa era una oportunidad. Daiana no sólo estableció la mejor marca del historial de Pampa Traviesa (2h31m41s), sino que consiguió la mejor marca de una maratonista argentina en suelo nacional. Fue escoltada por la cordobesa Rosa Godoy con 2h48m29s y la bonaerense Karen Cejas con 2h49m06s.

Daiana Ocampo comentó: «A veces las cosas no salen como uno las espera, por más de que lleve el control todo lo que sucede a mi alrededor, por más minuciosa que sea la preparación y que las sensaciones personales sean las mejores, hay factores que nos exceden, hoy no fue el día que esperaba, climáticamente hablando, pero si fue el día en que di todo lo que tenía como cada oportunidad que tengo de ponerme a prueba. Con el cuerpo dolorido a horas de haber corrido tengo la impresión de que perdí, pero en realidad no es así, este maratón me marcó, me fortaleció y acá estoy de pie a la espera de mejores días. Hoy termina un ciclo pero ya vendrán otros, porque así es este deporte, con frecuencia nos rompe el corazón y aún así lo sigo eligiendo por qué esa es nuestra esencia, la de no rendirse jamás».

NT