Actualidad
Por qué mariposa es el estilo de nado más difícil de aprender
Es un estilo complejo, pero nadar mariposa es uno de los mejores ejercicios en la piscina.
No es fácil y tiene un nivel de complejidad muy alto, pero es tal vez por eso que nadar mariposa es un reto que muchas personas lo intentan cuando entran a la piscina.
Está claro que la figura de Michael Phelps ha contribuido a que este estilo se haya popularizado en la última década, en especial tras sus cosechas de medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Pekín en 2008 y Londres 2012, cuando se convirtió en el deportista más laureado de las olimpiadas.
Pero lejos de las piscinas olímpicas, el estilo mariposa sigue siendo uno de los más atractivos de la natación, el que para algunos suele definir a los «verdaderos» nadadores de los aficionados.
También está el hecho de que si lo que se busca es quemar calorías este es el estilo recomendado ya que pone a trabajar una cantidad similar de músculos que el crol, pero obliga a las personas a exigirse más en los movimientos.
«La mariposa es el que más calorías quema por el esfuerzo que requiere. Se trata de una forma de nadar que requiere de mucha fuerza para sacar el cuerpo del agua, y cuanto más trabajo anaeróbico se realiza, más calorías se queman», señaló Sergi Ruiz, entrenador personal en el DiR.
«El problema es que aquellos que no saben cómo nadar mariposa se exponen a lesiones, además de que es muy fácil que se desanimen al no sentirse cómodos en el agua», resaltó el entrenador personal catalán.
Luis Rodríguez, técnico de la Federación Catalana de Natación y del Centro de Alto Rendimiento, CAR, considera que «el problema es que requiere unos niveles de coordinación y de complejidad técnica muy altos, además de que exige un nivel de esfuerzo mayor para mantener un ritmo consolidado y continuo».
A continuación te ofrecemos unos consejos rápidos del exnadador olímpico y campeón mundial, el británico James Hickman, de cómo debe practicarse este estilo.
Fase 1
Una de las cosas que se tiene que tener en claro es que los brazos deben salir del agua al mismo tiempo y que no deben ser arrastrados por el agua cuando se está en la fase entre las caderas y la posición de entrada.
Una vez en el agua, las manos deben estar por delante de los hombros y moverse hacia los pies.
Si utilizas la cabeza en la posición correcta te permitirá una desplazamiento mucho más fluido y te ayudará a conseguir la ondulación apropiada en tu cuerpo.
Fase 2
Cuando la manos están en el agua también debe estar sumergida la cabeza, con la barbilla tocando tu pecho.
Una vez que las manos están a la altura de los muslos se levanta la cabeza gradualmente hacia adelante para entrar en la fase de respiración, mientras se van sacando los brazos del agua.
Es importante mantener las piernas en movimiento, constantemente tirando con ambas piernas que deben estar cerca la una de la otra pero no juntas.
La acción en las piernas también ayudará la ondulación y a empujar al cuerpo a través del agua.
Fase 3
Después hay detalles que se pueden ir puliendo para ir perfeccionando la técnica como la posición de las manos dentro del agua o el movimiento que deben hacer los brazos, que debería similar al ojo de una cerradura.
Lo más difícil de todos estos movimientos es coordinarlos en el orden correcto, balance que se va perdiendo a medida que el cuerpo se va cansando.
El ciclo que se debe conseguir es el siguiente:
- Impulso con las piernas.
- Entrada y jalar las manos por debajo del agua.
- Impulso con las piernas.
- Sacar las manos y pasarlas por encima del cuerpo.
- Mantener la cabeza por sumergida hasta que las manos estén cerca de los muslos.
- Respirar rápidamente.