Las panteras no pudieron

Las Panteras jugaron un gran partido ante Polonia, pero en el tie break se vieron perjudicadas por dos fallos arbitrales. Se despidieron del Grand Prix con el aplauso del público chino.

Con las muelas apretadas y peleando hasta el último de los puntos, las Panteras finalizaron el World Grand Prix en un partido de alto vóley ante Polonia. Estuvieron cerca de decirle adiós a la competencia con un triunfo, pero en un tie break cerradísimo fueron perjudicadas por los árbitros en dos ocasiones. El tablero quedó en 25-21, 21-25, 25-12, 23-25 y 15-11.

La Selección femenina de vóley deja de esta manera China después de tres semanas de competencia, con dos triunfos y siete derrotas, con la dificultad de haber enfrentado a los mejores equipos del mundo, con el 16º puesto en la general, con kilos de millas entre Buenos Aires, Italia, Hong Kong y Wuhan. Antes de comenzar este periplo, la Argentina se había propuesto sumar roce internacional. Lo consiguió, claro.

El partido ante Polonia pudo haber sido el broche perfecto. Las Panteras tuvieron una de las mejores actuaciones de la gira. Les faltó constancia en la resolución del primer set y sufrieron un bajón en el tercero. En el global del match queda la capacidad para salir de los baches y el juego bajo presión del segundo y cuarto capítulo. También, buenas participaciones individuales de Josefina Fernández, de la líbero Tatiana Rizzo, de Lucía Fresco -18 puntos- y de Natalia Aispurúa -con cuatro tantos de bloqueo-.

Pero el análisis queda por estas horas en un segundo plano al reparsar el último set: cuando el partido estaba para el 10-10, en pleno envión argentino, el árbitro rumano y la segunda referí holandesa vieron en el piso una pelota que Emilce Sosa había salvado con el pie. Fue un punto de quiebre en todo sentido. Mientras las Panteras discutían, dieron la orden para que se hiciera rápido el saque polaco.

Y hubo más: en el punto del final volvió a influir el desacierto del silbato. En una jugada en la que todo el estadio vio tres golpes -incluido el del bloqueo de Yael Castiglione-, los árbitros observaron cuatro. Entonces, partido definido…

El público chino, que había aplaudido cada bola ganadora de la Argentina, se paró para despedir a las Panteras. Mañana comienzan el regreso a Buenos Aires, y enseguida se meterán en la preparación para el Sudamericano y el Premundial. Misión cumplida.