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Sin Sabatini, el hockey le ganó la pulseada al tenis femenino
Del Potro, Nalbandian, federer, Nadal, la Copa Davis y cómo afectó la explosión de las leonas, bajo la lupa de Gaby
Del Potro, Nalbandian, federer, Nadal, la Copa Davis y cómo afectó la explosión de las leonas, bajo la lupa de Gaby
Sin Gabriela Sabatini , el tenis femenino en la Argentina perdió, desde hace casi dos décadas, a su mayor inspiración. Es verdad que después de la ganadora del Abierto de los Estados Unidos 1990 y finalista de Wimbledon 1991 surgieron importantes jugadoras, con Paola Suárez y Gisela Dulko como estandartes, pero, naturalmente, ninguna alcanzó la dimensión de la hija de Osvaldo y Beatriz. El desarrollo del hockey sobre césped en las escuelas y los logros de las Leonas con Lucha Aymar y compañía, el arte de las raquetas perdió mucho terreno entre las mujeres. El stick ganó la pulseada, al menos por ahora.
«Creo que la explosión del hockey en el país afectó la producción de tenistas, sí. En el hockey nos caracterizamos por tener muy buenas jugadoras desde hace tiempo. Y con los logros de los últimos años, con Lucha, que ha ganado el premio a mejor del mundo, influyó un montón. Por otro lado, siendo padre o madre y mandar a tu hija sola con un entrenador a un torneo, no sé si estaría tan tranquila. Entonces, ahí ya las posibilidades son menores. Y el hecho de que no haya una, dos o tres jugadoras, como puede haber un Del Potro a quien seguir, influye, porque esto es contagioso. Messi juega como los dioses, los chicos se contagian y quieren ser como él», analiza, sin dudar, quien jugó su último partido oficial en octubre de 1996, ante Jennifer Capriati (EE.UU.) en el WTA de Zurich (perdió 6-3 y 6-4). De todos modos, confía en las cualidades de la actual número 1 argentina, la sunchalense Paula Ormaechea: «La he visto a Paula algunas veces en la Fed Cup. No la vi en partidos de Grand Slam. Pero es una chica que tiene buena mentalidad, actitud, eso le ha hecho ganar buenos partidos. Le falta más confianza en su juego, animarse más, debería lastimar más».
Sabatini ya no juega al tenis, ni siquiera en forma aficionada, pero sigue el circuito por TV, claro. Es, ante todo, una gran admiradora de Roger Federer. Es más, el año pasado, cuando el suizo visitó la Argentina, charlaron mucho. En aquel momento, el ex número 1 dijo que le hubiera gustado jugar dobles mixto con Gaby. «¿En serio? No lo sabía. A mí también (Gabriela lanza una carcajada). Qué halago. Lo admiro mucho como tenista. Y me parece un caballero. Tuve la posibilidad de conocerlo más y compartir cuando vino a Buenos Aires. Es una persona que tiene una luz especial. Todo su equipo es genial. Tiene una energía muy linda y es un placer hablar con él. Me gustaría poder hablar miles de veces más, pero bueno, seguramente en algún momento llegará. Admiro todo lo que hizo como tenista y lo que ha trascendido. Es una de esas personas que trascienden más allá de su tenis. Técnicamente hace todo. Su futuro va a pasar más por sus ganas, por su motivación en ganar. Si las derrotas se mantienen, no sé, el tiempo lo dirá. Ojalá que tengamos a Roger por mucho tiempo más. Él el otro día dijo que el año próximo no tiene mucho por defender y eso es una buena motivación.»
La técnica de Roger la encandila, pero tampoco ahorra elogios para Rafael Nadal: «Lo que hace en una cancha es increíble. El corazón y la cabeza que tiene son fabulosos. Es el gran competidor del circuito. Sabés que hasta el último punto lucha. Puede ir perdiendo 6-2 y 4-1 que no se da por vencido, lucha como si estuviera 4-4 en el tercero. Cuando jugás con una persona que tiene esa mentalidad, desmoraliza. Un poco así era Arantxa Sánchez. Sabía que tenía que jugar con ella y ¡uff!, había que lucharla hasta lo último».
Gabriela tenía un revés a una mano exquisito. Hoy, ese golpe está en extinción. ¿Qué sensación le provoca? «Amo el revés a una mano -sentencia-. Me encanta ver a un jugador que le pega a una mano. Es el golpe más elegante del tenis. Y para contrarrestar el revés con potencia, el top funcionaría muy bien, porque le modificás las alturas, el efecto, entonces podría ser un arma.»
La Copa Davis, David Nalbandian y Juan Martín del Potro, nombres propios bajo la lupa de Gaby. «Debatimos tanto por la Davis porque es una cuenta pendiente y porque sabemos que tenemos la posibilidad de ganarla. Estuvimos cerca. La de Mar del Plata fue una gran chance. Y todos los años se está llegando a semifinal, final, no bajan de eso. Entonces sabemos que se puede, por eso se exige, por eso se habla de la Copa Davis.» Sobre el cordobés, recientemente retirado, opinó: «Fue uno de los mejores jugadores de la Argentina. Su talento, su facilidad para jugar, yo creo que pudo haber sido número 1 del mundo». Mientras que de la Torre de Tandil detalló: «Lo veo con un tenis de los mejores. Me preocupan a veces sus lesiones, seguramente por el tipo de físico que tiene, por su altura. Pero tiene una cabeza de top, tiene una muy buena mentalidad. En el juego también es top, creo que debe creérsela un poquito más ante los grandes rivales, pero ya les ha ganado. Es como que tiene que dar ese pasito más».
Por Sebastián Torok | canchallena.com